Bin Laden está muerto. Poco a poco estamos acostumbrándonos a esta idea. El mundo entero, o por lo menos su parte occidental, está preguntándose cuándo habrá la venganza. ¿Se morrirán a su causa unos pocos cientos o incluso miles de personas? Me pregunto si y cuando, siguiendo los partidarios del terrorismo, se le expedirá un monumento o se abrirá un museo, explicando que se trata de una advertencia? ¿Imposible?
El Jueves, 15 de abril del año pasado, abrieron un museo dedicado a la organización genocida nazi de las SS. Como resultado de sus acciones, no a miles, sino millones de personas furon matados. Los archivos del museo muestran la historia de más de un millón de miembros de la guardia de Adolf Hitler y de su jefe Heinrich Himler cuyo diario personal está adornando la exposición cuidadosamente preparada.
foto. Orwellsky |
En aquella exposición de miles de elementos, hay dos "anillos de calavera", dado a los funcionarios de alto nivel. En los anillos de plata fueron grabados una firma de Himmler, el cráneo, una cruz gamada y la runa Sig – el símbolo más reconocible de la SS. ¿Cuál es el lugar donde nuestros vecinos del oeste mostraron al mundo la exposición? Pués, aquí tenemos otro escándalo. En el castillo de Wewelsburg, en el que los alemanes rezaron a sus dioses por la victoria, y donde después de la guerra, para cubrir la historia del lugar, se construyó un albergue juvenil.
Una mansión impresionante del siglo XVII, situado en una colina al sur de Hanover, en el centro de Alemania, desempeñó un papel clave en la historia de la SS. Himmler lo contrató para más de 100 años en 1934, poco después de que el partido nazi llegó al poder con la intención de convertirla en un centro de formación para la élite de los oficiales de la SS. Con el tiempo, tejó planes más ambiciosos para hacerse cargo de los pueblos de alrededor y para construir la capital de las SS, con el castillo como "el corazón del nuevo mundo" después de alcanzar una "victoria final".
Los Caballeros de Wewelsburg era un sueño de Heinrich Himmler, que quería crear una nueva orden germánica. Con este fin, entre otras cosas, se refirió a las tradiciones de la Orden Teutónica. Cerca de la ciudad de Paderborn, a medio camino entre Colonia y Brunswick, había las ruinas de un castillo medieval de Wewelsburg. Este es el lugar donde Himmler intentaba poner la sede del jefe de la SS. En el castillo se prepararon apartamentos especiales para los dignatarios de la organización. Sus nombres vinieron de famosas figuras históricas. Reichsführer de las SS eligió para sí mismo el apartamento Enrique I. Se construyó una gran sala, con una longitud de 35 y 15 metros de anchura, donde se iba a celebrar reuniones de las personas clave. En el sótano, se estableció el santuario de la orden - lugar de culto de la sangre, donde se organizó el llamado Bluttaufe (bautismo de sangre) - los rituales asociados con la admisión de todos los nuevos adeptos. La elección del lugar fue influenciado por la leyenda que decía que el futuro ataque desde el Este se chocaría sólo con un castillo en Westfalia. Resultó que las paredes más fuertes eran aquellas de Wewelsburg.
Para Adolf Hitler
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No todos los científicos creen que la palabra "orden", adoptada como parte del nombre de la organización, esté adecuada. Destacan, por ejemplo, que Himmler y sus colegas estaban particularmente fascinados por los personajes de Enrique I o Enrique el León, y el propio jefe de las SS se veía más bien como un seguidor de la tradición que el gran maestro. Por otro lado, el profesor Gebhardt, uno de los amigos íntimos de Himmler, dijó que Himmler se vaía como un maestro de la Orden, pero teniendo en cuenta solo una regla – la persona de Adolfo Hitler.
Estas palabras ponen de relieve la relación casi divina entre Himmler e Hitler, cuyo caballero y defensor quería ser el jefe de la SS. Según Himmler los miembros de la SS eran seguidores de las tradiciones de la caballería. Por lo tanto, muy importante para él era la fachada exterior. Se introdujeron insignias especiales, que iban a destacar la importancia de las SS y el poder y para crear una atmósfera de misterio y misticismo. Jefes de la organización podían pertenecer a una de las tres categorías. A cada una se le asignó una insignia especial: la placa, la espada y las armas. Menos importante, aunque también deseable, era el anillo de plata con el emblema de calavera.
Caballeros infernales
Los dignatarios más altos de SS eran los doce obergruppenfuhrer. Cada uno tenía su propio escudo de diseño especial. Himmler, en su comportamiento, se basó en un mito céltico del rey Arturo, que festejaba y se reunía con sus doce caballeros más valientes. En la gran sala en Wewelsburgu pusieron la mesa de roble para él y sus elegidos. En torno de la mesa había espacio para los asientos con escudos y nombres de cada uno de los 'caballeros'. Debajo de la torre norte, se diseñó también el mausoleo de mármol. En el centro, en una plataforma, donde se estaba quemando una llama eterna - iban a ser quemadoas las armas de los "caballeros". Alrededor de la tumba, había doce sarcófagos – con el del propio Himmler en el centro. La ventilación del interior no era la mejor, por lo tanto, durante las ceremonias había mucho humo, que parecía ayudar a establecer contacto con los espíritus de los muertos. Himmler ordenó a los dignatarios de la SS que siguieran los ejercicios espirituales especiales, durante los cuales iban a sentirse conectados con sus antepasados y buscar en ellos la inspiración y la fuerza interior necesaria para llevar a cabo su misión.
Un historiador de 27 años de edad, que ayudó a diseñar la exposición permanente del museo, dice que durante las celebraciones, habían estatuas o guardias colocados en plataformas sosteniendo las antorchas. Sin embargo, refutó el mito, que el Himmler celebraba en el cripto algunos rituales paganos extraños. "No se lo puede probar científicamente". No se puede. Así como no se puede decir en voz alta sobre tratar de encubrir la historia, que la prensa alemana prefiere guardar en silencio.
¿La idea de Himmler murió con él?
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La Gran Guerra se acabó y su resultado implicaba la delimitación de las perspectivas de todos los decepcionados. Son circunstancias en las que se iba a desarrollar la idea de Himmler. ¿Fueron elegidos de nuevo los doce caballeros? ¿Se reclutaron nuevos miembros y la organización ha evolucionado? Podían hacer dinero en el comercio de armas y en el control de los poderosos de este mundo. Comenzaron a debilitar la posición de aquellos que la orden decidió a neutralizar. ¿Influenciaron la historia del mundo, escondiéndose detrás de los terroristas? Había sólo un objetivo - construir un acuerdo masivo en Europa, que fue una consecuencia del concepto, mantenido durante cientos de años, para reemplazar los valores cristianos y la fe en Dios, con la nueva doctrina.
En el pasado, el instrumento más comun fueron guerras anterioramente planeadas. Hoy en día, se basan en los efectos obtenidos por hacer los países particulares ser dependientes de los suministros energéticos. "Sombras" que custodiaban la tumba de Cristo han sido sustituida por las sombras que protegen sus intereses. ¿Esta historia es irreal? Con toda la seguridad hay que señalar, como lo hizo el científico de 27 años, que no es científicamente demostrable.
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