Revoluciones

Sobre las revoluciones ya se han escrito muchos textos. Algunas tuvieron lugar aquí otras allá, y todas, al menos oficialmente, aparecieron de manera espontánea. Es un trivial pero hermoso y frequentemente usado que además oscurece eficazmente la imagen de lo que realmente sucedió. Hay muchos elementos que anteceden una revolución. Por ejemplo, siempre hay personas que tienen una cierta idea de reunirse en secreto y reflexionar sobre cómo cambiar el orden existente. Luego esperan pacientemente una situación conveniente, la crean, o, por último, deciden pedir ayuda a alguien más fuerte. Una cospiración muy parecida inició la Gran Revolución en Francia. Los bolcheviques también constituyeron una conspiración antes de llegar al poder. En el siglo XIX, todas las revoluciones que aparecieron en Europa, incluso la Primavera de los Pueblos, fueron provocadas por ciertos grupos de personas con sus objetivos particulares. Sería extraño si se mostrara que esta vez algo haya cambiado y las revoluciones que estallaron en la primera década del siglo XXI hayan sido totalmente espontáneas e provocadas por la gente descontenta. ¿Habéis pensado que la revolución en Ucrania era un movimiento social? – pues no! Los cambios de poder en Georgia y Ucrania no fueron impulsados exclusivamente por los opositores políticos. Los líderes de las manifestaciones habían sido intencionalmente capacitados de como llevar a la multitud. Como el fruto de la revolución podemos enumerar no sólo el cambio de poder, sino también cambios específicos en la orientación de estos países en el mapa mundial. Estos países de repente dejaron de apoyar la Comunidad de Estados Independientes, tomando la dirección pro-occidental, y empezaron a admitir bancos y medios de comunicación occidentales.

Las revoluciones del siglo XIX casi siempre fueron iniciadas por las personas que luego se mostraron miembros de las logias masónicas locales. Los candidatos a la presidencia, Yushchenko y Saakashvili, están fuertemente asociados con universidades de Estados Unidos donde estudiaron durante varios años. ¿Coincidencia? No creo en las coincidencias.

Aún más interesante será otra escena, en una presentación titulada "revoluciones en el Oriente Medio."